miércoles, marzo 28, 2007

Egoista

Anestesia con tus labios la muerte que yace bajo mis párpados, dame la calma de tu pecho tibio. O tócame la vida con tus ansias de reír, con tus manos frías, con el sueño de soñarme en cada curva de este lugar.

Estos versos que se derraman sin manchar tus manos frías, que son ambrosia para mi garganta y sal para las heridas de mis dedos.

Tráeme la piel de este cielo nublado podrido de sueños y poemas.

jueves, marzo 22, 2007

Este país

Cansada, asqueada, defraudada y avergonzada.

Este país empieza a convertirse en un circo.


No soporto, no entiendo y me cuesta respirar entre tanto rencor y tanta intolerancia. Y la política convertida en un arma arrojadiza y el pueblo de escudo.

Unos que estiran las situaciones hasta el caos, otros que son la negación sin razón, sin necesidad.

Me canso de las mentiras para recuperar el poder, del uso de símbolos más grandes que ambos partidos unidos. Harta de la demagogia barata, de la absurda antorcha que erigen como portadores del saber universal y la justicia.

Cansada de la política de rebajas, de la oposición sin sentido, de la falta de inteligencia, de la soberbia y del extremismo patético del que no obtiene lo que quiere.

Y no me valen manifestaciones de todo incluido, y gastos pagados. Y no me valen bailes de números. Y no me valen reconocimientos de ignorancia por parte de expresidentes que se ríen a carcajadas de 100 mil civiles muertos hasta la fecha. Y no me vale la utilización del patriotismo que hacen. Y no me vale la falta de decencia y de principios para volver a estar en el poder.

Y no doy cheques en blanco al gobierno que nos representa. Y critico lo que no me gusta. Y espero más y mejor. Pero lo de los otros… los de enfrente, los que da igual lo que se haga que nunca estará bien, los que venden a su madre al mejor postor y luego no se acuerdan, los que siempre son y están, los que llevan la ignorancia por bandera.

En esos ni confío ni creo. Y sinceramente espero que algún día abran los ojos, y salgan a la calle para ver lo que realmente es este país, y lo que necesita.

Que bufones… ya tenemos suficientes en la prensa que les ampara.

jueves, marzo 15, 2007

Escondida

¿Dónde me escondo?

En la piel, en los ojos de esta absurda ciudad que vende lo que nunca tuvo y regala lo que debió guardar de las miradas ávidas de los que tienen todo. Me escondo en los árboles, sólo en ocasiones especiales, y me deslizo de noche entre los adoquines de alguna calle angosta que me cuenta secretos que no quiero conocer.

En algunos lugares no sé si esconderme o habitarme, pero hay personas que me obligan a huir y buscar otra rendija en la que deslizarme. Me escondo en las manos de quien me quiere esconder, y en los labios que mis labios trenzan. En el cuerpo caliente de la noche que me amanece, y en el cristal de sus ojos cuando me encuentran.

Me escondo en las palabras que me hacen real, en los versos ajenos y en los que torpemente escribo.

lunes, marzo 05, 2007

Lluvia

Llovía y no tenía paraguas. El flequillo trasquilado le cae sobre los ojos , mojando aun más las pestañas y nublando los pasos y las baldosas resbaladizas. Aun hay hojas en el suelo, empapadas de barro y lluvia gris. Y las huellas se pierden entre los adoquines, entre las piernas confundidas, entre los aullidos de los coches. Tiene calor, la lluvia le acalora y agota, la exprime la diseca. Las gotas acariciando su pecho y sus brazos, ajustando la ropa a su piel confundiéndose con el sudor frío que la envuelve. La chica de los periódicos se apresura a darle uno mientras se intenta proteger con una mano de lo inevitable. Se sonríen como cada mañana más por costumbre que por educación. El café caliente como el aire de la cafetería, y sus labios aun húmedos de la lluvia acariciando el borde de la taza. Las noticias se entrelazan en un caos patético tan amargo como el sabor del café sin azúcar que toma. Y la lluvia que cesa y una extraña claridad que invita a pensar que volverá a llover. Más pasos en la acera, más gotas en la frente. Y la tristeza intacta cosida a los parpados.