Spiderman y Stitch

Son muy distintos. Lo sé.

Spiderman tiene el pelo oscuro, ondulado... y cuando me mira, se le ilumina la cara. Sabe sonreir. Tiene los ojos oscuros y grandes, aun más cuando te pregunta ¿por qué? y sin respuestas pienso: No sé el porqué... pero presiento que algún día, te acercarás y mirándome a los ojos, con tu sonrisa perfecta dirás: Ya lo sé, lo descubrí (y tu no).

Le gusta correr. Me encanta que me empuje por el pasillo, y me coja de la mano. Creo que soy su juguete y no me importa. Como me va a importar... si tiene el don de curar las heridas con besos.

Es mentiroso. Se cree sus propias mentiras... y yo a veces también. Discuto con él, sólo por el placer de verle arrugar la nariz y mirarme serio, pensativo... enfadado. Otras veces le digo que me voy... para que me regale uno de sus besos pidiéndome que me quede.

Spiderman, es noble, celoso a ratos, pero es el ser más dulce que conozco.


Stitch sin embargo, es rubio. Tiene el pelo muy lacio... es increible el olor de su pelo. Puedo pasarme horas oliéndo y besando su cabeza. Sus ojos son azules, a veces no lo son. Arruga la nariz, y entorna los ojos. Hay momentos en los que parece que lo sabe todo, que nada le es indiferente. Es listo.

Stitch sabe reir; lo hace abriendo toda la boca, y te mira porque sabe que tiene el don de hacer reir a la gente, de arrancar sonrisas y de regalar felicidad, con sólo una de sus carcajadas.

Es caprichoso y tiene caracter. Grita. Grita mucho. Y sabe que los demás no entienden el porqué de sus gritos, pero él sigue empeñado en que algún día le comprendan. Yo sé que estaré cerca cuando eso pase.

Stitch es inquieto, alegre... es como un rayito de luz.


Les quiero. En el fondo, creo que no son tan diferentes.